News — 13 July, 2023

RightsCon 2023: buscando la intersección de los derechos humanos y los mapas

El pasado junio se realizó la RightsCon, el evento global que reúne a activistas y organizaciones que trabajan por los derechos humanos, y el Hub LAC se hizo presente en busca de mapas y mapeadores!

Hace algún tiempo, cuando era editor para una plataforma ciudadana global, me invitaron a hacer cobertura remota vía Twitter de un evento de derechos humanos. Disfruté mucho la experiencia y sobre todo conocí bastante sobre las distintas luchas que se dan en diversas partes del mundo para defender los derechos humanos (y digitales). Ese fue mi primer contacto con la RightsCon.

Recientemente -del 5 al 8 de junio- se llevó a cabo una nueva edición de la RightsCon en San José, Costa Rica. Esta edición era muy esperada, ya que se había anunciado para 2020 pero tuvo que ser postergada por la pandemia. Con la remisión de esta, finalmente pudo realizarse de forma presencial y en línea este año.

Al ser la región sede de un evento de esta magnitud, en el Hub de Mapeo Abierto de América Latina y el Caribe, estimamos que la asistencia de organizaciones y activistas de la región sería considerable, por lo que resultaba importante asistir también y tomarle el pulso al evento desde nuestra propia perspectiva “cartográfica”.

Brett Solomon, ED de Access Now da el discurso de apertura y menciona a Alaa Abd El Fattah, el blogger egipcio actualmente encarcelado que dio el discurso de apertura de la RightsCon 2011.

En este punto cabe mencionar que si bien a primera vista podría no parecer clara la relación entre mapas y derechos humanos, esta existe. Los mapas están vinculados a varios derechos como:

-Derecho a la vida. La vida sucede en un territorio. -Derecho a un territorio/nacionalidad. -Derecho al libre tránsito. -Derecho a la información (por ejemplo: de la oferta que existe en el territorio que se habita) -Derecho a la representatividad (es decir, actuar y tomar decisiones en razón de la vida que sucede en ese mapa). Y lo más importante: -El derecho a estar en el mapa.

Al ser la RightsCon un evento realmente grande, asistieron cientos de personas de también cientos de organizaciones defensoras de los derechos humanos y digitales de todo el mundo. Para que tengan una idea, hubo más de 600 eventos presenciales, híbridos y online. A pesar de tal envergadura, la producción estuvo a la altura y en general todo salió muy bien…

Por mi parte asistí a la mayor cantidad de charlas que pude, que fue menos de la mitad de las que me interesaban tanto a nivel laboral como personal. Por ejemplo estuve en “Tejiendo soluciones comunitarias para necesidades de comunicación a través de procesos de formación”, en “Community generated data, Indigenous data sovereignty, and defending Indigenous peoples’ rights”, y “Redes sociales libres: usos, alcances y desafíos para nuestras organizaciones” para citar unas cuantas.

Sin embargo, algo que me impactó fue que de todos esos 600 eventos programados solo uno (sí, uno) estuvo directamente relacionado con el mapeo o la cartografía digital. Se que no era precisamente el lugar para encontrar proyectos de mapeo como tal, pero esperaba un poquito más de proyectos que ligaran los DDHH con la cartografía abierta, dadas las posibilidades existentes.

Lo que sí encontré fue varia gente interesada en proyectos de mapeo: organizaciones y personas queriendo mapear cámaras de vigilancia en la región, feminismos, comunidades invisibilizadas en los mapas oficiales, derechos, territorios, y sobre todo, encontré a antiguos y expertos colaboradores de la comunidad OSM centroamericana que esta deseosa de volver a unirse y contribuir en proyectos comunes.

Diversas charlas en la RightsCon.

Conversar e intercambiar ideas con toda esta gente me resultó muy inspirador. Creo que el futuro del trabajo en torno a los mapas y los derechos humanos y digitales es prometedor y ofrece numerosas oportunidades para generar un impacto social. A medida que avanzamos hacia una sociedad cada vez más conectada y necesitada de información geoespacial, deberíamos incluir en nuestros proyectos de mapeo algunas acciones clave para lograr ese impacto:

1. Promover la colaboración y la participación inclusiva en la creación y el uso de mapas. En otras palabras involucrar a comunidades locales, organizaciones de derechos humanos y digitales, y expertos en cartografía para garantizar que los mapas reflejen la diversidad de experiencias y necesidades. Además, es fundamental fomentar la perspectiva de género en el mapeo, para asegurar que las voces y las realidades de las mujeres y otros grupos sean consideradas en la representación cartográfica.

2. Fortalecer las capacidades técnicas y el acceso a herramientas de mapeo colaborativas. Es decir, brindar capacitación y recursos para que las personas y las organizaciones utilicen y contribuyan a plataformas abiertas como OpenStreetMap. Así, se fomenta la autonomía y la capacidad de las comunidades para mapear y visualizar sus realidades locales, con lo que aumentan su capacidad para hacer incidencia por sus derechos.

3. Abordar las cuestiones éticas y de privacidad relacionadas con el mapeo de derechos humanos y digitales. Se deben establecer salvaguardias claras para proteger la información personal y garantizar que su uso sea coherente con los principios de transparencia y responsabilidad. Además, es importante considerar el consentimiento informado y la protección de los datos sensibles al mapear áreas que pueden ser vulnerables o conflictivas.

4. Fomentar la colaboración interdisciplinaria y el intercambio de conocimientos entre expertos en derechos humanos, tecnólogos y profesionales de la cartografía. La combinación de perspectivas y habilidades diversas puede llevar a soluciones innovadoras y ampliar la comprensión de los desafíos y oportunidades en esta intersección de conocimientos.

Aplicar estas ideas guía nos permitirá aprovechar plenamente el potencial de los mapas como herramientas para promover la equidad, la justicia social y el respeto de los derechos fundamentales, y por ende servir mejor a las comunidades con las que trabajamos.

Finalmente, traté de registrar algunas de las conversaciones que tuve -y que me inspiraron las ideas esbozadas en este post- así que les dejo los enlaces para que escuchen sus ideas y propuestas de boca de los propios involucrados.

Con Selene Yang de Geochicas y Wikimedia, conversamos sobre la importancia de tener la perspectiva de genero en el mapeo y gestión de desastres, y también cómo incluir y apoyar a las comunidades Youthmapper. Con Rodrigo charlamos de OpenStreetMap como herramienta para la incidencia política y el cambio social, de la utilidad de OSM en la construcción de capacidades en organizaciones de la sociedad civil y ONG, y las posibilidades de OSM en deportes como el ciclismo. Y Jaime Gutiérrez lanzó una convocatoria a la comunidad mapeadora centroamericana, alrededor de temas de trabajo que pueden interesar a todos y sobre todo incluyendo a los mas jóvenes.

Esta publicación es una versión del original publicado aquí.