News — 19 December, 2024
Cartografiando Historias: Crónica de una Jornada en las Laderas de Medellín
En Altos de la Torre, Medellín, un taller de mapeo reunió al Hub de Mapeo, POMOTE y colectivos locales. Usando ChatMap, se visibilizó el territorio y se fortaleció a la comunidad frente a riesgos socionaturales.
El ascenso por la ladera era empinado y desafiante. Cosa de media hora, decían. Al final, resultaron casi dos horas de caminata, que bien compensaron una semana de cardio para quienes tenemos la suerte de vivir en la parte plana de la ciudad. Para los locales, sin embargo, es parte de su rutina diaria. Bienvenidxs al Medellín no mapeado.
POMOTE, el Centro de Estudios de Poblaciones, Movilización y Territorios de la Universidad Autónoma Latinoamericana (UNAULA), lleva varios años trabajando en procesos de educación, investigación y sistematización de experiencias. Su objetivo es fortalecer las capacidades de las comunidades y organizaciones que habitan en estas zonas altas de Medellín, conocidas como laderas.
¿Has oído hablar del barrio de las escaleras eléctricas de la Comuna 13 y su tour grafitero? Este lugar, ubicado en una de las laderas de la ciudad, ha pasado por un proceso de gentrificación que enmascara problemáticas comunes en estas zonas, como la violencia residual, el microtráfico y las desapariciones forzadas. Aunque recibe atención mediática y turística, no te dejes engañar: no todas las laderas de la ciudad consiguen tanta atención preferencial.
Desde hace dos años el Hub de Mapeo se ha asociado con el POMOTE para ofrecer un curso-taller de acercamiento al mapeo libre digital en OpenStreetMap, y construir proyectos de mapeo locales asociados a la gestión del riesgo, la adaptación al cambio climático, la participación y los intangibles comunitarios, el arte urbano y la transformación social de los territorios.
En este contexto, se organizó una salida de campo al barrio Altos de la Torre con participación del Equipo Humanitario de OpenStreetMap (HOT), POMOTE, los colectivos Ciudad en Movimiento y Psicólogas sin Fronteras; y, representantes de la comunidad local. El objetivo era mostrar a los colectivos cómo hacer mapeo sobre el terreno con diversas herramientas y que estos puedan replicar el conocimiento en los territorios sobre los cuales trabajan, y que la comunidad local pudiera mostrar la realidad de su día a día a través del mapeo.
La caminata nos permitió apreciar las características especiales de la zona —y comunes a otras zonas del mundo similares conocidas como favelas, barriadas o slums— que la hacen complicada de mapear en forma remota. Encontramos: construcciones de diversos materiales que se superponen unas a otras, pasajes ocultos por construcciones, direcciones informales o inexistentes, cursos de agua fluyendo por entre las casas montaña abajo, puentes precarios hechos con troncos, etcétera.
Esta observación sobre el terreno se vio complementada con el contexto aportado que proporcionaron las y los miembros de la comunidad que nos acompañaron, como por ejemplo la narrativa de cómo surgieron los barrios de la zona, la histórica falta de servicios, las problemáticas que fueron enfrentando como la violencia de los grupos armados y el narcotráfico, o el riesgo de los desastres naturales, la respuesta de la propia población a todo esto, los apoyos recibidos de diversas organizaciones de cooperación, entre otros. También, a lo largo del recorrido, fueron identificando las edificaciones importantes para la comunidad como el colegio, el centro comunal y otros puntos de interés.
La mayoría de estos puntos de interés se mapearon fácilmente gracias a ChatMap, una nueva herramienta desarrollada por nuestro equipo técnico. Con esta herramienta, basta con compartir por WhatsApp la ubicación, una descripción o una foto del lugar, y automáticamente se genera un mapa que incluye todos estos puntos.
El descenso fue menos exigente, aunque hizo crujir las rodillas de los más veteranos del grupo. Sin embargo, también nos brindó la oportunidad de reflexionar en voz alta con nuestro compañero de ruta sobre la importancia de abordar de manera integral las necesidades de los barrios. En este proceso, el mapa debe ser tanto la base como la herramienta que permita a las propias comunidades construir un futuro mejor para sí mismas.